De Tjolomadoe / Airmas Asri

Curado por María Francisca González

Arquitectos: Airmas Asri; Airmas Asri
Área: 13600 m²
Año: 2016
Fotografías:Mario Wibowo
Proveedores: Toto, Acor, Asahimas, Dekson, Dulux, Jotun, Oetemodeck

Descripción enviada por el equipo del proyecto. Establecida en 1861 durante la era colonial holandesa en Surakarta, De Tjolomadoe es la primera fábrica de azúcar en Indonesia. Se sitúa cerca del Palacio Regencia, rodeado de campos de caña de azúcar. Después de varias políticas gubernamentales y la venta de tierras, los campos desaparecieron y en 1997 la producción se detuvo debido a la quiebra del operador. Durante varios años, el lugar se utiliza como un lugar de reunión para artistas, artesanos, poetas y activistas locales para comulgar y hacer festivales, exposiciones o actuaciones.

En 2016, el Ministerio de Empresas Estatales reestructuró y reactivó sus acciones, dentro de los cuales se encuentra De Tjolomadoe. Sin embargo, como los campos de caña de azúcar ya no rodean el área, no es posible reactivar la fábrica. Por lo tanto, es necesario reprogramar el complejo para que vuelva a funcionar a pleno rendimiento.

Se designó a Airmas Asri para formular un programa que revitalizara el diseño conceptual que debía ser desarrollado en cuanto a situación y clima, comenzando por este histórico edificio que se encontraba en un severo estado de dilapidación.

El lugar ya había recibido críticas y reacciones públicas debido al abandono de su valor cultural e histórico al ser una de las primeras plantas de producción y fábricas de azúcar desde la época colonial. Hubo eventos artísticos y culturales frecuentes que llamaron la atención e interés del público. Era evidente que la fábrica abandonada debía ser restaurada.

La revitalización es la clave de la estrategia de diseño. Por lo tanto, para volver a obtener la vitalidad, se conservó la parte no intrusiva del edificio existente para que la fábrica adopte su nueva función. Por contexto, Surakarta y Karanganyar no se pueden separar de su industria doméstica de batik, megalitos y templos de piedra hechos a mano y tradicionales, la cultura y la gente javanesa arraigada, por lo que, como empresa estatal, esta demanda se prioriza como un concepto integrado en el sitio abandonado.

Se planea un centro de cultura y arte que se adapta a la fábrica abandonada. Al tratarse de un edificio histórico y público, pasó por varios requisitos. Los procedimientos de planificación, identificación, investigación de documentos históricos y evaluaciones estructurales preliminares por construcción y conservación se realizan en 6 meses, seguidos de la construcción de una Sala de Conciertos de 3500 metros cuadrados, que es la atracción principal del edificio.

De hecho, muchos de los artefactos de la tecnología de la era del vapor no han sobrevivido debido a la severa corrosión del metal en la estructura, el saqueo y el peligro para la exhibición pública. Estos artículos fueron retirados y desechados como chatarra. El artefacto y la identidad de la traza histórica por número de serie, fotografía y artículos encontrados en un periódico holandés se conservan para que se exhiban al público.

El registro arquitectónico de la fachada de ladrillo principal se encontró en 1921 en una firma de arquitectos en Semarang, el cual experimentó varios cambios y emplazamientos durante el tiempo de vida de la producción de Azúcar en la fábrica. Algunas partes del edificio deben ser demolidas debido a su falla estructural, pues muchas de las secciones de ladrillo han sido severamente expuestas al clima y se desmoronan por su propio peso, algunas secciones no fueron el diseño original y se encontraron en muchas partes del edificio y un nuevo diseño como relleno se realiza para adaptarse a las mejores proporciones y al lenguaje arquitectónico como un edificio público.

Muchas partes del edificio sobreviven y solo necesitan una modernización de nuevos componentes, como ventanas, puertas, toldos, techos, canalones y piezas de máquinas sostenidas que se restauran como restaurantes, sala de exposiciones y sala de conciertos.

Las secciones frontales del edificio que cubren un gigantesco rodillo de presión a vapor se transforman en el vestíbulo principal de las tres funciones principales a medida que atrae la atención y el interés del público.

Muchas habitaciones al aire libre están cerradas con un muro de vidrio para exponer la maquinaria gigante interior como una exhibición durante la noche, algunos son tanques Moller y se mantienen expuestos al interior de la sala de conciertos, ya que era una de las piezas originales de la fábrica.

El hervidor de vapor principal se mantuvo como una pantalla, ya que su estructura está incrustada en la chimenea principal y es demasiado peligrosa para quitarla. La habitación se transforma en un restaurante. Solo 2 de las 9 calderas sobrevivieron.